El recinto se fundó en el año 1147 siendo dependiente del cercano monasterio de Mellifont Abbey. Los restos que se conservan en la actualidad no pertenecen a la época de su fundación sino a las reformas que tuvieron lugar en los siglos XIII y XV, pertenecientes a la sala capitular, el claustro y la iglesia.
El complejo fue abandonado en 1543 debido a la ley de disolución de los monasterios y fue utilizado más adelante como fortaleza, de ahí la construcción de la torre.