En la Edad Media, este topónimo designaba solo el condado de Flandes, entidad feudal fundada en el siglo X. En los siglos posteriores, y en particular durante la época de los Países Bajos españoles, la palabra Flandes pasó a cubrir un territorio mucho más amplio, correspondiente, a grandes rasgos, a la zona de la Europa Occidental denominada actualmente Benelux (Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo) y a zonas limítrofes de las actuales República Francesa y República Federal de Alemania:
La totalidad de la zona septentrional del Estado borgoñón (1363-1678).
En la actualidad, Flandes corresponde a tres espacios:
La región Flamenca de Bélgica, o Flandes belga, división territorial con instituciones políticas y administrativas propias que corresponde a la mitad norte del país. Es el territorio al que hoy en día se alude en general cuando se habla de "Flandes".