El Movimiento Revolución Ciudadana (RC) es un partido políticoecuatoriano de tendencia progresista, fundado originalmente con el nombre del Movimiento Fuerza Compromiso Social (FCS), por Iván Espinel. Surgido como plataforma política personal de Espinel, en 2019, el movimiento integró en sus filas al correísmo, que se volvió la facción mayoritaria dentro de la organización política, por lo que, en 2021, el movimiento cambió de nombre y orientación política.[6] Actualmente, funge como brazo político de la corriente política homónima, declarada de orientación de izquierdaprogresistaantineoliberal y es liderada por el expresidente Rafael Correa.[7]
Desde el 2021 se ha posicionado como la primera fuerza política del Ecuador, ganado las elecciones legislativas y la primera vuelta de las elecciones presidenciales, sin conseguir ganar la presidencia hasta el momento.
Historia
Origen
Iván Espinel, primer presidente del movimiento
En el 2010 se forma el "Frente Integral de Profesionales por la Salud" (FIPS) conformado por 15 médicos que eligieron como su líder a Iván Espinel. El frente se fue ampliando hacia afuera del sector de la salud pasando a adoptar el nombre de "Frente Integral de Profesionales" (FIP) en 2012 y al siguiente año se tornaría en "Fuerza Integral País". Finalmente en febrero del 2016, la agrupación política tomó el nombre definitivo de "Fuerza Compromiso Social" que sería legalizado por el Consejo Nacional Electoral en 18 de agosto de ese año.[8][9]
Primera contienda
Las elecciones presidenciales y legislativas de 2017 fueron las primeras en las cuales participaron. Su binomio presidencial fue conformado por Iván Espinel y Doris Quiroz que consiguieron el sexto lugar, estando delante de dos candidatos presidenciales. Mientras en la Asamblea Nacional, donde la candidatura estuvo liderada por el abogado Héctor Vanegas, obtuvo el décimo lugar en la votación, sin llegar a obtener ningún escaño, lo que también pasaría en el Parlamento Andino con el séptimo lugar en la elección.[10]
Durante la campaña electoral el discurso de Espinel resultó en polémica, proponiendo la pena de muerte para los asesinos y violadores, a la vez que pese al hecho de declararse oposición al gobierno de Rafael Correa, se alió dentro del Pacto Ético por el "Sí" a la consulta popular donde la mayoría de la oposición daría el "No" como rechazo al correísmo.[9]
Para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, el movimiento decidió dar su apoyo al candidato del oficialismo, Lenín Moreno, mas señalaron que el apoyo era a Moreno y no hacia Alianza País, entonces dirigida por Rafael Correa.[11] Tras la victoria de Moreno y su posesión como presidente, Iván Espinel asumió la cartera del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), esta dignidad la ostentara hasta finales del año cuando renunció en medio de denuncias de corrupción cuando trabajaba en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).[12][13] Por el mismo tiempo surgieron fricciones en el Guayas desde donde se anunció una desafiliación masiva del movimiento, al estos oponerse a la gestión de Espinel.[14]
Espinel señaló que su renuncia al ministerio respondía a la cercanía de la consulta popular de 2018, donde, junto con el oficialismo y la oposición al correísmo, apoyaría al "Sí" a las preguntas.[15] Meses después, el exministro será arrestado por el inicio de casos en su contra y en noviembre renunciara a la presidencia del movimiento, cediendo este cargo a la hasta entonces vicepresidenta Vanessa Freire.[16]
Llegada del Correísmo
Ruptura de Alianza País
Tras el 24 de mayo de 2017, el nuevo gobierno de Lenín Moreno dio inicio a un diálogo nacional al que se invitaría a los grupos de oposición que habían tenido mínimo o ningún contacto con el anterior gobierno. La disputa entre Correa y Moreno se fue viendo al estos comenzar a criticarse. El distanciamiento ya se hizo evidente cuando el 25 de agosto Ricardo Patiño, Virgilio Hernández y Paola Pabón renunciaron a sus cargos en el gobierno tras el primero realizar un viaje a Bélgica donde se encontraba el expresidente.[17]
El 31 de octubre se oficializa la ruptura al Moreno ser destituido de la presidencia de Alianza País por la facción correísta, entregando el liderazgo a Patiño.[18] Al mes siguiente se anuncia una convención nacional con el propósito de expulsar a Moreno del partido, mientras el Consejo Nacional Electoral (CNE) decide ratificar a Moreno en la presidencia del partido y daba paso a la ya anunciada formación de un nuevo movimiento.[19][20]
En la Convención Nacional de la facción correísta se oficializó la expulsión de Moreno y Correa declaró que en el caso de no conseguir mantener el partido en manos correístas se daría paso a la formación de un nuevo partido con el nombre de "Revolución Ciudadana" que era la forma como se había autodenominado su gobierno.
El 16 de enero de 2018, tras el dictamen anunciado por el Tribunal Contencioso Electoral (TCE), se confirmó a Moreno como nuevo presidente de la tolda política, rechazando la decisión del buró político. De forma inmediata, Rafael Correa entregó ese día al Consejo Electoral su formulario de desafiliación al partido, acto en el cual lo siguieron el resto de sus simpatizantes y su grupo de asambleístas.[21] Ese mismo día se inician los trámites para inscribir un nuevo movimiento político como se había planeado meses antes, sin embargo, el Consejo Electoral rechaza iniciar el proceso por este ser el eslogan de otro movimiento.[22]
Los primeros actos de la organización serían una campaña contra la consulta popular de ese año; por no estar aún inscritos como movimiento, realizaron la campaña bajo el nombre de la organización social del Foro de Mujeres, esta sería la única organización que se había inscrito en respaldo del "No" a la consulta, opción la cual perdió.
El 23 de febrero se cambió de denominación a "Revolución Alfarista", conectando su nombre con la figura de Eloy Alfaro, para conseguir la inscripción en el consejo electoral, sin embargo, tampoco consiguió la aceptación del organismo.[23][24][25]
El 5 de mayo de 2018 se dejan los intentos de inscribir un partido propio y se integran en el Movimiento Acuerdo Nacional (MANA) que ya había sido aceptado por el poder electoral para iniciar su inscripción. Para el 8 de agosto se darían disputas en MANA ante el surgimiento de una directiva, liderada por Víctor Hugo Erazo, que era contraria a la unión con el correísmo y que impediría la inscripción del partido en un tiempo en que ya se habían recolectado las firmas para la inscripción.
Compromiso Social por la Revolución Ciudadana
El 20 de diciembre del 2018 se anunció que el Movimiento Revolución Ciudadana (MRC) iba a ir dentro de las listas de Fuerza Compromiso Social para las elecciones seccionales del siguiente año, tras no poder inscribir su propio movimiento ni poder inscribir al Movimiento Acuerdo Nacional (MANA).[6] Así se inscriben personajes como Alexandra Arce, Pierina Correa, Luisa Maldonado y Paola Pabón a las elecciones seccionales. Con esta inclusión, se obtuvieron las prefecturas de las provincias de Pichincha y Manabí, junto con el segundo lugar en Guayas y la alcaldía de Quito, por sobre Paco Moncayo.
El 7 de abril se condena por cohecho en el Caso Sobornos 2012-2016 al líder del movimiento Revolución Ciudadana Rafael Correa, quien es condenado a 8 años de prisión y a 25 años sin ejercer algún cargo público, por lo que se lo imposibilita para candidatearse en el 2021.[26] Así mismo, el Consejo Nacional Electoral elimina del registro electoral al movimiento debido un informe emitido por la Contraloría General del Estado que alertaba sobre irregularidades con las firmas de sus adherentes al momento de su inscripción, y que por lo tanto no participarán en las elecciones presidenciales de 2021.[27]
El 19 de julio de 2020, el Consejo Nacional Electoral (CNE) suspendió su registro, el movimiento consideró que esto era parte de una persecución política, recordando el correísmo la no inscripción de la Movimiento Revolución Ciudadana (MRC) y del Acuerdo Nacional (MANA).[33]
En agosto se anunciaría la precandidatura de Andrés Arauz para la presidencia y con Rafael Correa como su binomio para la vicepresidencia. Sin embargo, su aceptación a la precandidatura fue rechazada por el Consejo Nacional Electoral al ser un trámite personal, presencial e indelegable, al encontrarse Correa fuera del país ya que reside en Bélgica.[34] Sin embargo, los candidatos a la Asamblea Nacional y el Parlamento Andino no tuvieron contratiempo alguno en aceptar sus candidaturas, bajo el auspicio de Centro Democrático, con Pierina Correa, hermana del expresidente, encabezando la lista de asambleístas nacionales.[35][36]
El 7 de septiembre el CNE aceptó su inscripción de UNES para las elecciones generales de 2021. En diciembre del 2020 se registró en el CNE su nueva directiva donde se consolida la fusión del movimiento y la Revolución Ciudadana, eligiendo a Andrés Arauz como el presidente del partido.[37] El 22 de mayo de 2021, Arauz renunció a la presidencia del movimiento.[38]
El 28 de agosto de 2021, durante la convención nacional del movimiento, se decidió cambiar el nombre del movimiento a Revolución Ciudadana, cambiando sus colores a turquesa y rojo, cambiando el logo del movimiento al usado por la Revolución Ciudadana y eligiendo a la exministra Marcela Aguiñaga como presidenta del movimiento, Paco Hidalgo como vicepresidente y David Villamar como secretario.[39][40]
Durante el gobierno de Guillermo Lasso fue el principal partido de la oposición tras este romper el acuerdo legislativo entre el correísmo, el Movimiento CREO y el Partido Social Cristiano.[41]Sufrió críticas por su acción durante la votación de la Ley de Desarrollo Económico y Sostenibilidad Fiscal propuesta por Guillermo Lasso, al no haber aprobado su archivo causando que pase al Ministerio de Ley.[42]
En 2023, quedaria como primera fuerza política de país con su victoria en las elecciones seccionales de 2023, con 50 alcaldías, destacando las victorias de Pabel Muñoz en Quito y Aquiles Álvarez en Guayaquil, así como 8 prefecturas. Esto junto con la derrota de Lasso en el referéndum y las acusaciones de corrupción dentro del gobierno, llevarían a que junto con la bancada socialcristiana dieran inicio al juicio político contra el presidente.
Acuerdo Legislativo con Noboa y traspaso a la oposición
La aplicación de la muerte cruzada por Lasso llevaría a nuevas elecciones. El correísmo quedó como primera fuerza en el Legislativo nuevamente, pero no conseguiría los votos suficientes para asumir la Presidencia de la República, que quedaria en manos de Daniel Noboa. Críticas internas en el partido llevarían a la renuncia de Marcela Aguiñaga y una convención en donde Luisa González, excandidata presidencial, asumiria el cargo de presidenta del movimiento.[43]
Revolución Ciudadana conseguirá llegar a un acuerdo con Acción Democrática Nacional (ADN) y el Partido Social Cristiano (PSC), obteniendo la vicepresidencia primera de la Asamblea con Viviana Veloz.[44]
El 2 de octubre de 2024, la correísta Viviana Veloz es posesionada como presidenta de la Asamblea, después de la renuncia del presidente Henry Kronfle.[46][47]
Ideología
Originalmente, Fuerza Compromiso Social se definía como una organización pública no estatal, política social, soberana, democrática e independiente; y declarándose alejada de las ideologías de izquierda y derecha, autodenominándose de centro político.[48] Con unión a este de simpatizantes de la denominada Revolución Ciudadana se ha hecho evidente la afinidad al socialismo del siglo XXI que guio el gobierno de Rafael Correa.[6]
Tras la llegada del correísmo, el partido se reestruturó, teniendo en la actualidad una ideología de izquierdaprogresista. Asimismo, el Movimiento Revolución Ciudadana se opone al neoliberalismo y al imperialismo, teniendo una afinidad con los movimientos y gobiernos progresistas de Latinoamérica.[7]
↑ abcdeMovimiento Revolución Ciudadana, ed. (28 de agosto de 2011). La fuerza de nuestras ideas(PDF). Consultado el 23 de septiembre de 2023.
↑León T., Magdalena (2020). «Sobre el sentido común antineoliberal y otros debates necesarios». En Parodi, Camila; Sticotti, Nicolás, eds. Ecuador: la insurrección de octubre (Buenos Aires: CLACSO): 248-259. JSTORj.ctv1gm016x.39.
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