Estrenó La Fiebre del día, con aplauso de Cañete, además de El sentido común, La dote (comedia, 1891), Cuentos del maestro (1906), El triunfo de la templanza (1906), Escenas infantiles (1907), Aventuras de Alfeñique (1907), La Venganza del mar (1907), Cuentos de cuentos (1907), En busca de la Fortuna (1907) y La Vida interna (poesías, 1912).[2] Torromé, que fue inspector de primera enseñanza en Toledo y Madrid,[1] falleció en 1924 en Madrid.[4]